Me he
resistido a escribir sobre el asunto, pues desde un principio no lo vi nada claro.
España es un país poco serio, en el que un periódico publica unas fotocopias y
el sistema se tambalea. Evidentemente, el nerviosismo del Pp ante la “exclusiva”
de El País le deja a uno pensativo, pues si a mí me hacen eso no hubiera
tardado ni 24 horas en denunciar los hechos ante la fiscalía, ante la
dificultad de determinar de momento al destinatario de una posible querella. Así que digo yo que alguna vergüenza debía haber para tanto balbuceo y nerviosismo de primera hora.
Si los documentos son verdaderos y se demuestra que había una contabilidad B, deben rodar cabezas de arriba a abajo. Pero si
finalmente se demuestra que los documentos son falsos, será el mayor gol que le
hayan metido a Rubalcaba y a Prisa desde tiempo inmemorial y el que lo haya
ideado ha dejado corto a Fouché. Desde
luego, si la Fiscalía descubre que los papeles son falsos, el Director de El
País debe responder civil y penalmente ante la justicia. Y Rubalcaba debe
dimitir de forma inmediata por pedir la dimisión del Presidente del Gobierno en
base a una falsedad.
Ya lo están
viendo venir y empiezan a mover ficha para alegar que lo grave son los
millones de Bárcenas y no los papeles….Si, si, los millones de Bárcenas son
como para sospechar que algo no se ha controlado bien y para exigir la culpa in
vigilando de quien debía vigilar. Pero poner patas arriba todo una nación en
base a una documentación falsa y acusar de defraudadores a tantas personas, sin
prueba alguna, no debería salir gratis. Es evidente que los políticos están bajo sospecha, pero la prensa también debe hacérselo mirar, porque ya está bien que en España siempre se invierta la carga de la prueba cuando quien acusa es un medio de comunicación.
Y por
cierto. Qué diferencia la del Fiscal General con respecto al felpudo de Conde
Pumpido. En eso, por lo menos, estamos mejor.
Esperemos a ver qué pasa, pero el provenir próximo se presenta turbulento.
Esperemos a ver qué pasa, pero el provenir próximo se presenta turbulento.
LFU