"Mi sueño es el de la patria, el pan y la justicia para todos los españoles, pero especialmente para los que no pueden congraciarse con la patria, porque carecen de pan y de justicia.". JOSÉ ANTONIO

16 de junio de 2011

"La carta de mi nieto". por José Utrera Molina


Reproduzco a continuación el artículo publicado hoy en la página 4 del diario La Gaceta

Ayer, concretamente en el periódico El País, se publicaba una carta de mi nieto Rodrigo en relación con los insultos y agresiones que había sufrido su padre recientemente. He de comenzar escribiendo que el protagonista de esta carta, Rodrigo Ruiz-Gallardón Utrera, goza por mi parte de una estimación fuera de lo común. Le conozco, sé que acumula en su joven personalidad una serie de virtudes poco frecuentes, pero sobre todo tengo que señalar su admirable claridad mental, su objetividad, su falta de prejuicios y su incontaminación de cualquier género de sectarismo político. Es todo un hombre, que es la mejor definición que se puede hacer de una persona. Me ha conmovido su carta porque en ella afirma rotundamente un concepto que fue muy habitual en la prosa política de Ortega y Gasset, quien decía: “Hay que pensar con arquitectura”, es decir, con perspectiva. Añade Rodrigo que vivimos en un gravísimo momento histórico y alude también al final a una descomposición de valores que todos sufrimos. Suscribo esta angustiosa preocupación y esta reflexión serena de mi nieto.

Hace unas noches, cuando eran aproximadamente las dos menos cuarto de la madrugada, un griterío infernal me despertó de mi sueño; según pude comprobar después, era el clamor de los indignados en las calles más céntricas de Madrid. La verdad era que mi despertar con sobresalto no lo había sufrido desde hacía muchísimos años cuando las calles de Málaga eran recorridas por gentes que gritaban: “Hijos sí, maridos no”. Yo pregunté por aquellas fechas, con tan sólo 10 años, qué significaba aquello y mis padres respondieron: “No saben lo que dicen”.

A ese pozo insondable de la memoria han venido en estos días múltiples recuerdos, algunos clavados como punzadas en los primeros latidos de mi joven corazón. Creía tal vez ingenuamente que esas etapas de crispación histórica habían terminado. Recordaba las frases de Aristóteles cuando escribía que el cobarde y el valiente no podían ser igualmente estimados. Ahora compruebo que no es así y que quizá, en el final de este túnel oscuro por el que transitamos, se pueden adivinar situaciones por cuya liquidación hemos trabajado y yo diría que rezado muchos españoles. Hoy al leer la prensa me informo del criterio sublime de Ramón Jáuregui de desenterrar el cuerpo de Franco del Valle de los Caídos. Me parece un soberano disparate y, sobre todo, la traducción a nivel muy concreto del insaciable odio que llena el corazón del presidente del Gobierno, que en definitiva quiere prorrogar su legislatura para culminar los objetivos sectarios y antinacionales que tiene en su sagrada agenda. Es muy posible que la queja y el grito de muchos españoles no pueda impedir tamaña injusticia histórica. Que nuestras palabras se ahoguen en el silencio, que nuestras quejas se ignoren por completo, que nuestro dolor no sea atendido, que nuestra indignación no sea estimada. Pero tenemos muchos españoles la obligación al menos de escribir con letra firme la verdad entera de lo que ha sido la historia de España, hoy manipulada y aniquilada, por los que representan el Gobierno de la Nación. Que sepa Zapatero que un pueblo no puede vivir esclavo de los caprichos de un demagogo, de un enfermo de ira y de rencor. Que queremos por todos los medios que desaparezca de la escena española y que nos libere de esa atroz pesadilla que estamos sufriendo día tras día con su presencia.

¿Es posible –me pregunto– que un torrente de odio semejante pueda acercarse a las venas calientes de España? ¿Es posible que una capacidad impresionante de rencor, pretenda ahogarnos sepultándonos en la mentira de lo que ha sido con sus errores y con sus defectos, con sus fallos y con sus éxitos la torturada historia de España? ¿Es posible centrar en la vida de un hombre, como fue la de Francisco Franco, el cúmulo de condenas que sin rigor y sin justicia se están representando sobre su nombre? Parece que sí, sin embargo, aunque mi voz sea ingenua y solitaria, incapaz de movilizar el sentimiento de nadie con el corazón en alto y el alma en vilo, proclamo y declaro que es insoportable la falta de ecuanimidad y de dignidad histórica del presidente del Gobierno y también la de sus acólitos que, por miedo o por otras causas similares, permanecen en silencio contemplando todo este desastre. Dios quiera mandarnos en algún momento un rayo de luz para que se rompan las tinieblas que soportamos con impotencia y amargura. Dios quiera que la ventura de una nueva esperanza nos sitúe con el alma tranquila y que la sombra nefasta del presidente del Gobierno aparezca disuelta en el desprecio y en la señalización de su poderosa ignorancia.

Es verdad que vivimos unas horas gravísimas pero es también muy cierto que la energía histórica de España no puede sucumbir ante tanto cieno y tanta vileza. Hay que creer en el milagro y yo, octogenario superviviente, creo en él y espero que algún día, aunque yo no pueda verlo, España quede liberada de la ruindad de tantos enanos y malandrines como los que nos gobiernan en la actualidad. Hoy estoy orgulloso de romper mi silencio. Quizá mis palabras aparezcan como salidas de un horno hirviente, pero no podría nunca soportar que alguien me señalara por la indignidad de mi silencio.

José Utrera Molina.

15 de junio de 2011

El gobierno, dispuesto a profanar el sepulcro de Francisco Franco



Si España fuera, en verdad, un Estado de Derecho en el que el gobierno estuviera sometido al imperio de la ley, no me preocuparían las delirantes declaraciones del Ministro Jáuregui sobre el proyecto del gobierno de exhumar los restos del Generalísimo Franco. Pero como Zapatero ha demostrado durante estos años de infamia que el Estado de derecho sólo existe cuando le interesa, me preocupo y mucho.

Jáuregui sabe perfectamente que de acuerdo con la ley necesita (i) la autorización de la familia, sin cuya concurrencia no es posible realizar la exhumación y traslado del cadáver de Francisco Franco (ii) la autorización de la Comunidad de Madrid, que tiene delegadas las competencias en materia de exhumación y traslado de cadáveres y (iii) la autorización del Abad Mitrado del Valle de los Caídos, sin cuya autorización no puede realizarse actuación alguna dentro de la Basílica Pontificia. Además, debe revocar y dejar sin efecto alguno la decisión real de enterrar al Caudillo en la Basílica del Valle de los Caídos con la que ilustro esta entrada.

Aún así, y anticipándose a las conclusiones de la Comisión de la Infamia designada ad hoc para adornar la profanación, es capaz de mentir abiertamente afirmando (i) que ha mantenido contactos con la familia Franco, lo cual me consta, por referencia directa que es falso y (ii) que el Gobierno puede prescindir de la autorización de la familia para ordenar la exhumación de los restos de Franco.

Si partimos de que la familia no va a conceder la autorizacíón, no es aventurado concluir que el Gobierno se propone, no sólo infringir el procedimiento administrativo legalmente establecido sino cometer un delito de profanación regulado en el artículo 523 del Código Penal.

Desde aquí aviso que no lo va a tener facil. Yo y muchos otros vamos a plantarle cara a éste gobierno cobarde, sectario y despótico. Ya lo hicimos cuando cerró de la noche a la mañana la verja del Valle para prohibirnos oir misa y ganamos. Volveremos a hacerlo, cueste lo que cueste, al menos para que nuestros hijos y nuestros padres no puedan decirnos que no hicimos lo posible para evitar una nueva infamia del más nefasto gobernante que ha padecido España.

LFU

14 de junio de 2011

¿Quo vadis España?



En la España del infame ya cualquier cosa es posible. Indignante resulta que los homosexuales militantes acosen al alcalde de madrid en las puertas de su domicilio para protestar por la prohibición de conciertos en la irritante jornada del orgullo gay, fiesta que asquea a la inmensa mayoría de quienes no hacen de sus preferencias sexuales -muchos homosexuales incluidos- bandera, exhibición o simplemente, patético espectáculo.

Pero más indignante aún es que la Delegación del Gobierno y el Ministerio del Interior permita este tipo de algarada callejera y la que hemos tenido que soportar todos los madrileños con unos miles de andrajosos adoradores del Ché que han decidido que la calle es suya y que no van a admitir que la izquierda sea desalojada del poder. No sé a ustedes, pero a mí esto empieza a recordarme cada vez más a los años 30 y al exquisito respeto democrático que la izquierda demostró cuando perdió las elecciones del año 1933.

En cualquier país serio, todos estos gamberros habrían pasado la noche en comisaría. Pero el caso es que a Rubalcaba, esto, no le molesta en absoluto. Ya verán cómo acaba sacándole partido al maloliente movimiento.

LFU

8 de junio de 2011

Totalitarismo




Zapatero medita la conveniencia de dictar, por vía de Real Decreto Ley, una nueva y definitiva biografía del General que tenga carácter imperativa y cuyo mero cuestionamiento pueda ser constitutivo de delito de los que dan lugar a procedimiento de oficio.

Desde luego, este inutil ha conseguido que el disparate más colosal se convierta en verosímil.

LFU

3 de junio de 2011

Ladran, luego cabalgamos






No es broma. El Partido Comunista de España ha denunciado ante la Fiscalía a la Real Academia de la Historia por "apología del franquismo", delito inexistente, pero del que me declaro autor material, con los agravantes de premeditación, alevosía y reiteración.

Mientras tanto, casi cinco millones de compatriotas no tienen trabajo y sin duda, su principal preocupación es, naturalmente, cómo se escribe la historia. Como magistralmente escribe Jesús Sanz Rioja, en democracia no hay censura, hay revisiones historiográficas

No hay duda alguna de que la estupidez humana no tiene límites.



LFU




P:D. No dejen de leer Villamarina

31 de mayo de 2011

Valle de los Caídos: la Comisión de la Infamia










Ya dije hace tiempo que Zapatero aún tiene preparados algunos fuegos artificiales antes de abandonar la Moncloa. Uno de ellos es el colofón de la ofensiva contra la Verdad materializado en la Ley de Memoria Histórica, consistente en el nombramiento de una Comisión de expertos para proponer el nuevo destino del Valle de los Caídos.

En primer lugar, llamemos a las cosas por su nombre. Los nombres de los “expertos” han sido cuidadosamente escogidos entre los mayores expertos en manipulación, odio y revancha contra todo lo que signifique la España de Franco. Por desgracia, el peor de todos ellos es el monje benedictino e historiador de Monserrat Hilari Raguer, una de las personas que más odio ha demostrado contra la figura del Generalísimo Franco, mintiendo sistemática y descarnadamente en cuantos libros ha escrito y entrevistas ha concedido para ofrecer una imagen maléfica de quien salvó a la Iglesia de la mayor persecución que ha sufrido en la Historia. Un religioso separatista al servicio del odio y de la mentira. Una verdadera contraditio in terminis que se une a otros ejemplos más lamentables de cómo el olor a azufre ha conseguido impregnar también a religiosos y sacerdotes en todo el mundo.

El guión está escrito y los nombrados lo han sido para hacer el paripé y bailar al son que dicta el resentimiento del presidente más inútil, ignorante, cínico, mentiroso y descarado de la historia de España. Me alegro de que la Conferencia Episcopal se haya desmarcado de la iniciativa, pero es insuficiente: la Iglesia debe exigir respeto al Concordato con la Santa Sede y recordar al infame presidente que el Valle de los Caídos es Basílica Pontificia, por lo que no pueden hacer mangas y capirotes con ella como si fuera la bodeguilla de la Moncloa.

Ante esta nueva ofensiva, la Comunidad benedictina del Valle de los Caídos ha pedido una campaña de oración, a la que yo me sumo gustoso, pidiéndoos a todos que recéis conmigo la siguiente plegaria:

“Atiende, Señor, nuestras súplicas, con las que ponemos en Tus manos los destinos del Valle de los Caídos. Preserva el carácter de lugar de culto y de cementerio de todo el recinto y no permitas que se interrumpa el cántico de alabanza que diariamente allí se Te ofrece. Que la Virgen del Valle sea nuestra protectora ante Ti, juntamente con todos nuestros Santos y Mártires.”

Amén

LFU