Hoy tengo que dar las gracias a Y yo me la llevé al Río, por rescatar del arcano de la memoria un magnífico texto del Teniente General Guttiérez Mellado, -del que confieso nunca imaginé que suscribiría con entusiasmo texto alguno- que merece la pena leerse con atención:
«La guerra acabó con una victoria por la que no se va a pedir ahora perdón, como pretenden algunos; lo que no supone que no merezcan comprensión y respeto los que lucharon limpiamente al otro lado. El régimen que surgió legitimado con la victoria no puede ser juzgado hasta que desaparezcan quienes vivieron aquella etapa en la vida de España; cuarenta años de historia no constituyen una etapa transitoria para volver a empezar e ignorar este periodo, y querer basar cualquier actividad política en lo que pasó en la guerra es no querer que la paz siga imperando en España. El respeto a la memoria de Franco ha de ser aceptado por todos y es piedra de toque para que la paz sea posible... El olvidar nuestra guerra y mirar hacia adelante no supone entreguismo, claudicación ni humillación para ninguno, sea cual fuere el bando en que luchó, sino, al contrario, paz donde antes hubo lucha; convivencia pacífica en vez de posiciones agresivas y permanente cooperación en vez de acciones contrapuestas; relaciones políticas normales contra la dialéctica de la violencia. Todo ello encuadrado en un mapa político nuevo que permita las discrepancias ideológicas pero exigiendo y respetando unas reglas de juego iguales para todos.»
Teniente General Manuel Gutiérrez Mellado, 1977.
La guerra civil y la represión no fue ninguna "guerra entre hermanos" como todos los derechones reciclados quieren hacernos creer.
ResponderEliminarOlvidar la guerra y los cuarenta años posteriores de represión y barbarie es un insulto a la memoria de quienes murieron injustamente en esa guerra, seria el último crimen de unos criminales perdonados sobremanera, no es posible conseguir "justicia" solo se puede conseguir que no se olviden las barbaridades cometidas por el bando ganador, ya que se han pasado 70 años ocultas por los hijos de los asesinos.
Si te incomoda la verdad no te dediques ha hacer un blog para darte la razón a ti mismo, es absurdo y triste.
De vez en cuando lo leo, pero creo que es solo para cabrearme, porque, sinceramente, además de mal escrito, es, sobretodo, patético, no paras de regodearte en tu propio sentimiento de culpabilidad.
Nada que alegar en cuanto a la calidad de mis escritos. Sin duda es mejorable.
ResponderEliminarNo escribo para darme la razón, sino para manifestar lo que pienso y siento, aunque a totalitarios recalcitrantes como tú les moleste y les incomode que alguien vaya contra corriente. Menos mal que no te autodenominas demócrata, porque si no, aviados estábamos.
No te cabrees, hombre. Admite que no estás en posesión de la razón y ya está. Negar que la guerra fue una guerra entre hermanos es sufrir una desorientación brutal, puede que trufada por lecciones de estalinismo trasnochado.
Te recomiendo que leas, por ejemplo, los episodios de la guerra en Cerro Muriano, batalla en la que se enfrentaron dos hermanos al frente de dos compañías. Yo en mi familia los tuve de los dos bandos y todos eran honrados.
Hubo una ESpaña que no se resignó a morir aplastada por el totalitarismo marxista. te recomiendo leer a Juilán Besteiro:
La verdad real: estamos derrotados por nuestras propias culpas: por habernos dejado arrastrar a la línea bolchevique, que es la aberración política más grande que han conocido quizá los siglos.
Julián Besteiro, 1938.
Dusty machine, con todos mis respetos, le diré que en el bando republicano también se cometieron atrocidades y barbaridades. Mi abuela fue asesinada, estando embarazada y perdiendo también el hijo que esperaba, por sindicalistas radicales, posiblemente anarquistas, en compañía de mi abuelo, tras votar en las elecciones del 36 en Canarias. El "crimen" de mi abuelo, según esos desalmados, fue tener tierras y eso que era apolítico. Por tanto, tambíen hubo barbaridades cometidas por los republicanos.
ResponderEliminarClaro que no niego las barbaridades de los dos bandos, la única diferencia de ambos, es que las atrozidades realizadas por los de izquierda, era gente a parte del gobierno elegido democráticamente, es decir, no seguian órdenes, en cambio, las masacres del bando golpista eran órdenes expresas y tenian una intención de exterminio (recordemos que es la misma idea que el resto de los fascismos europeos).
ResponderEliminarNo intento ni nunca intentaré justificar ninguna de las barbaridades de ningún bando, pero es innegable que las del bando golpista fueron mayores y "mecanizadas", además se alargaron por 40 años, por eso, intentar negar y sepultar las memorias de los que "perdieron" con leyes absurdas como la de la amnistía de 1977 o eufemismos como "guerra entre hermanos".
No es cuestión de hacer "justicia" (me reitero de que es imposible) sino de contar la verdad, y darle el respeto necesario a las víctimas (los muertos fascistas son héroes, llevan siéndolo desde el final de la guerra, en cambio los asesinados por los ejércitos golpistas no son más que carne de cuneta, por ejemplo)
Veo que repites el argumentario estalinista, hace tiempo superado. Mira, en el Madrid rojo, la estrategia de aniquilacion sistematica de tus amigos le costo la vida a mas de 10.000 personas. Preguntale a tu amigo Santiago, que fue felicitado efusivamente por Dimitrov por la eficacia de su "limpieza" segun pudimos saber cuando se abrieron los archivos del KGB. Y que decir de los mas de 7000 religiosos y religiosos asesinados en un sistematico plan de eliminacion puesto en marcha en toda la zona roja. Paracuellos sirvio de pauta para Katin, donde los sovieticos repitieron la misma pauta. Atados por los pies de dos en dos, eran arrojados a la fosa tras descerrajarles un tiro en la nuca. Muchos murieron asfixiados. Deja ya de decir estupideces. En la zona nacional no existio ningun plan semejante y las injusticias, que las hubo, se produjeron antes de que existiera un mando unico, en 0ctubre de 1936. Que la represion fue dura y hasta injusta, lo admito, pero nada comparable por ejemplo a la represion de la Francia democratica con los colaboradores de Alemania en los años 40. Te sobra adoctrinamiento y te falta conocimiento.
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo contigo, LFU.
ResponderEliminarEn mi caso personal, tras el asesinato por manos rojas de mi abuela, las autoridades republicanas de Las Palmas hicieron la vista gorda ante el interés de mi abuelo por denunciar a los asesinos. Como los asesinos eran sindicalistas importantes dentro del bando republicano, las autoridades se inhibieron. Esto ocurrió en febrero de 1936, tras las elecciones que ganó el Frente Popular. Y a partir de aquel momento, mi abuelo guardaba en su casa una pistola para defenderse en el caso de que por la noche vinieran los republicanos a llevárselo y dejarlo luego tirado y muerto en una cuneta, cosa que nunca ocurrió afortunadamente para él.