"Aproximadamente 600.000 españoles habían muerto durante el conflicto, y otros dos millones habían quedado mutilados o heridos. Medio millón de hogares habían sido destruidos o gravemente damnificados. Ciento ochenta y tres pueblos habían sido arrasados; dos mil iglesias habían sido pasto de las llamas; una tercera parte de las cabezas de ganado de la nación habían sido sacrificadas y casi la mitad del equipo ferroviario había quedado destruido. Pero era todavía peor el daño moral y espiritual inferido a España por los tres años de guerra. Tendrían que pasar varios lustros para borrar los odios encendidos en el alma española por el conflicto y para eliminar la herencia psicológica de una guerra fraticida cuya ferocidad superó la de la mayoría de las luchas internacionales."
"O llevarás luto por mí". Larry Collins y Dominique Lapierre, 1967. (pág.155)
Esto fue escrito hace ya cuarenta años por dos extranjeros que se impregnaron del alma y del ser español. La sociedad española había olvidado la guerra, miraba al futuro con esperanza y estaba lejos de pensar que un niño que entonces tenía siete años iba, cuarenta años después, a remover de nuevo los odios de la guerra. El odio es el arma favorita de los pusilánimes y Zapatero lo es. Por eso estoy seguro de que tarde o temprano acabará probando su propia medicina.
LFU
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