"Mi sueño es el de la patria, el pan y la justicia para todos los españoles, pero especialmente para los que no pueden congraciarse con la patria, porque carecen de pan y de justicia.". JOSÉ ANTONIO
18 de septiembre de 2007
Sin palabras....
El Ministro de Defensa, Sr. Alonso, asistiendo a la tradicional ofrenda a los Caídos en la Escuela Naval de Marín. Todo un ejemplo de no saber estar. Todo un ejemplo de falta de respeto.
LFU
1 comentario:
Anónimo
dijo...
No ofende quién quiere, sino quién puede. Una muestra más de talante y , supongo, que la antesala de la "Educación para la ciudadanía". La consigna es el odio a una religión, la católica, al mismo tiempo que nos empachan con sobredosis de "Alianzas de Civilizaciones". ¿Con qué civilización nos quieren aliar?, ¿con la de la guerra santa?, ¿la de la discriminación a la mujer como ser inferior, el maltrato físico y la ablación de clítoris?, ¿la que condena a muerte a los homosexuales, amigo Zerolo?. Sin embargo, les asquea una religión que predica el Amor y el Perdón por encima de todo, una religión dedicada en gran parte a cuidar de enfermos rechazados en numerosas ocasiones por las instituciones que deberían acogerlos, una religión acostumbrada a sufrir el martirio y el asesinato en 1936 de manos del partido ahora gobernante. Esa religión, cuyo símbolo supremo es Jesús muriendo en la cruz, es a la que da la espalda el "heroico" Ministro de Defensa. Supongo que se lo obliga el talante y , también creo que si estuviera ante un Imán tendría al día siguiente agujetas en todos los músculos de su cuerpo por las reverencias y contorsiones para demostrar su cariño y comprensión a dicha ¿religión?. Pero como he dicho al principio, no ofende quién quiere sino quién puede, y estoy convencido que la talla moral de los Caballeros de la Escuela Naval de Marín está por encima de tan patética actitud y el hecho quedará en chusca anécdota para los momentos de descanso. Antonio Vallejo San Juan
El Ministro de Defensa, Sr. Alonso, asistiendo a la tradicional ofrenda a los Caídos en la Escuela Naval de Marín. Todo un ejemplo de no saber estar. Todo un ejemplo de falta de respeto.
1 comentario:
No ofende quién quiere, sino quién puede. Una muestra más de talante y , supongo, que la antesala de la "Educación para la ciudadanía". La consigna es el odio a una religión, la católica, al mismo tiempo que nos empachan con sobredosis de "Alianzas de Civilizaciones". ¿Con qué civilización nos quieren aliar?, ¿con la de la guerra santa?, ¿la de la discriminación a la mujer como ser inferior, el maltrato físico y la ablación de clítoris?, ¿la que condena a muerte a los homosexuales, amigo Zerolo?. Sin embargo, les asquea una religión que predica el Amor y el Perdón por encima de todo, una religión dedicada en gran parte a cuidar de enfermos rechazados en numerosas ocasiones por las instituciones que deberían acogerlos, una religión acostumbrada a sufrir el martirio y el asesinato en 1936 de manos del partido ahora gobernante. Esa religión, cuyo símbolo supremo es Jesús muriendo en la cruz, es a la que da la espalda el "heroico" Ministro de Defensa. Supongo que se lo obliga el talante y , también creo que si estuviera ante un Imán tendría al día siguiente agujetas en todos los músculos de su cuerpo por las reverencias y contorsiones para demostrar su cariño y comprensión a dicha ¿religión?. Pero como he dicho al principio, no ofende quién quiere sino quién puede, y estoy convencido que la talla moral de los Caballeros de la Escuela Naval de Marín está por encima de tan patética actitud y el hecho quedará en chusca anécdota para los momentos de descanso.
Antonio Vallejo San Juan
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